Siempre tendrás a esa persona que te haga sentir vivo, que te acelere los latidos del corazón, que sólo haga falta pensar un segundo en alguna imagen suya e inmediatamente te haga sonreír de verdad. Esa persona por la que, piensas que el tiempo se va muy rápido, con la que te gustaría que el universo te hiciera el favor de parar todo tu alrededor, menos a vosotros dos. Esa persona que te saca tu lado más tierno, más nervioso, más oscuro, que te hace crecer como persona. Esa persona que, si te dieran a elegir entre tu vida o la suya, darías la tuya y más por mantener su hermosa existencia en este hostil mundo. Esa persona por la que lo malo, desaparece. Esa persona que a cada momento, en cada cosa que hagas, sabes que está presente, aunque no esté. Esa persona con la que crees que el cielo existe y que el infierno no sería tan malo si estuvierais juntos. Esa persona, por la que ahora mismo estás sonriendo y en la que estás pensando mientras lees esto. 

Duele ver cómo tiempo pasa, cómo las oportunidades se van desvaneciendo poco a poco; duele ver cómo las cosas van cambiando, a la vez que las personas. Duele que te decepcionen. Duele ver que cuando te caes, nadie está ahí para echarte una mano, aunque, el peor dolor, es cuando todo esto, lo ves en ti, cuando ves cómo vas cambiando, cómo de un día a otro, eres una persona completamente distinta a la que eras, duele crecer, duele decepcionarte a ti misma, una y otra vez, duele cometer errores, sí. Duele contradecirte todo el tiempo, tú y tu mente, en una eterna batalla en la que sabes, que aunque entres con mucha fuerza, te ganarán, duele mucho levantarte un día y darte cuenta de que la vida, ya no es ni lo que era, ni tan bonita. Duele sentirse impotente, queriendo arrasar océanos, pero sin poder saltar apenas un charco, duele saber que todo lo que tienes ahora, un día se irá, duele saber que por mucho que lo desees, ya nada volverá a ser lo mismo. ¿Cuántas veces has pensado abandonar?, ¿cuántas veces te has sentido derrotada, sin ganas de seguir adelante? Yo muchas. Y ahora me pregunto...¿qué es lo que me hizo cambiar tanto?, quizás cada caída que he tenido, cada error que he cometido, cada momento vivido, cada decepción que he sentido, quizás, esas pequeñas cosas, a la larga han causado su efecto, ahora sé, que la vida, no es tan fácil como creía, ni tan bonita, pero también sé, que todas estas cosas son en realidad momentos por los que simplemente he tenido que pasar, sin quererlo, en el fondo, aún sigo estando, como siempre, y sé que algún día, todo esto se irá, que cada cosa mala, la iré superando, no importa el tiempo, no importa, lo importante es eso, superarlo y sé, que lo superaré y volveré, siendo más fuerte, más positiva, viendo la vida, como realmente se merece, observando todo, sonriéndole al tiempo y a la vida, centrándome en lo realmente importante y en lo bueno de la vida, la oportunidad de vivir, ¿qué más darán los errores?, sé que a veces es realmente difícil convivir con los recuerdos malos de tu vida, pero no te llevan a ningún lado, al contrario, te hacen retroceder, ponte a pensar, ¿de qué te vale estar amargado, sin ganas de vivir? yo sé de lo que hablo, recordando las cosas que no están, no te las traerán de vuelta, son palabras duras, pero muy ciertas, pensando en que la vida no puede ser peor, no te hará verla mejor, por eso, aunque no puedas, aunque estés cansado, sólo observa, mira a tu alrededor, siente el sol, vive cada sonrisa, abraza, llora, pero hazlo de alegría, vive cada momento, para que en algún momento del futuro, puedas decir, " sí, aproveché cada momento de mi vida" o "la vida, realmente es bella", porque todo depende de la ventana por la que quieras mirar, elige la correcta.